Nos encanta pasar momentos de vacaciones en la playa, en la piscina o en la montaña. Sin embargo, hay que prestar mucha atención a la exposición solar porque puede traer consecuencias negativas. Como las quemaduras solares que son lesiones agudas en la piel causadas por una exposición excesiva a los rayos ultravioleta (UV) del sol, especialmente los rayos UVB.
Cuando la piel se expone sin protección durante un período prolongado, las células cutáneas se dañan. Ello puede generar síntomas como enrojecimiento de la piel, dolor y sensibilidad al tacto, hinchazón, calor en la zona afectada, ampollas, descamación de la piel o fiebre, escalofríos o náuseas. Para que no te ocurra, desde Medifar queremos darte las claves para saber tratar las quemaduras solares.
Claves para saber cómo hacer frente a las quemaduras solares
– Alejarse del sol inmediatamente: a veces notamos como la piel se va calentando y no podemos el remedio más básico y esencial. Por eso, evita más exposición solar hasta que la piel se recupere por completo.
– Enfriar la piel: aplica compresas frías o toma duchas tibias/frescas para enfriar la piel después de notar las quemaduras solares. Eso sí, evita el hielo directo ya que puede dañar más la piel.
– Hidratar intensamente: usa lociones calmantes tipo after sun con ingredientes como aloe vera, pantenol o caléndula. Es importante que las emplees después de una exposición solar. Pero también puedes aplicar otras varias veces al día para tener la piel hidratada.
– Beber abundante agua: la exposición solar puede provocar deshidratación al resecar la piel. Beber agua ayuda a la recuperación general de la piel, tanto por dentro como por fuera.
– No reventar ampollas: si se forman ampollas, no las explotes bajo ningún concepto. Son una defensa natural y deben reventarse solas. Después limpia la zona suavemente con agua y jabón neutro y cúbrela con un apósito estéril.
– Usar analgésicos y médico: paracetamol o ibuprofeno pueden ayudar a reducir el dolor y la inflamación. Consulta a tu medico si las quemaduras solares cubren áreas grandes del cuerpo, hay fiebre, ampollas, vómitos o desorientación.